Recupera

Por: Gaby Aguilar, Psic. Gestalt Infantil

En estos tiempos de estar en casa, con tus hijos, encerrados, sin saber cómo entretenerlos, aparentemente en caos, ¿cómo poder con tanto?, ¿cómo salir airosa de esta cuarentena?, si hay tanto que hacer y ningún lado al cuál escapar.
Reconéctate con ese momento en que decidiste ser mamá, reconéctate con ese amor y sobretodo, con esa fuerza que guardas dentro de tí, busca dentro, muy dentro esa capacidad de dar vida, de crianza, de ser ese otro yo que necesita tu hijo.
Recupera este momento, resignifícalo: detrás de toda crisis está una oportunidad de crecimiento.
Aprovecha esta oportunidad para dar más tiempo a ese hijo demandante, o tal vez para ensayar cómo ponerle más o mejores límites.
Para entender por qué batalla para aprender algunas cosas, para entender ese otro lado que no ves de tus hijos, ese que está en la escuela.
Tienes una oportunidad maravillosa para conocer más a tus hijos, para aprender juntos a convivir, no sólo a ser ellos y tu, a través de la rutina.
Nadie dijo que es fácil, no lo es, y menos si trabajas… pero tal vez este alto en el camino les permita re-conocerse, re-acercarse, re-construir, recuperar los días y los momentos, fortalecer el vínculo y sobretodo, permitirles saber que su casa es un lugar seguro para aprender, para estar, para convivir.
Recupera la calma, recupérate a tí misma… recupera tu ser mamá.
A veces no sabemos cómo hacerlo, te dejo algunas sugerencias que pueden funcionar:
-Cuando sientas que pierdes la calma, haz un alto y respira. Se vale hablar de lo que sientes: “ahora no hijo, necesito 5 minutos para calmarme y entenderte mejor.” Es increíble la capacidad de respuesta de los niños cuando les decimos lo que pasa con claridad.
-Establece una rutina equilibrada de trabajo y esparcimiento, a los niños les ayuda mucho saber qué va a pasar en el día, si es posible, hagan planes juntos, en la medida en que se sientan más involucrados estarán más motivados.
-No todo es tarea. Hagan espacios de salir al jardín, ver una película o cocinar juntos, los momentos de esparcimiento siempre son necesarios.
-Espontaneidad: salir de la estructura de manera inesperada les permite a los niños saber que la vida también es fluir: “estaba planeado esto, pero ¿qué les parece si hacemos esto otro y luego retomamos lo demás?”
-Los niños pueden: los niños tienen la capacidad de generar sus propias actividades, no todo tiene que ser pensado por tí, también es sano que se aburran y ellos mismos busquen cómo desaburrirse.
-Recuerda tu infancia: recupera lo que de niña te permitía hacer tu vida, tal vez leer, jugar, tal vez incluso hasta pelear, todo es una oportunidad de aprendizaje.
-Relájate: no todo tiene que estar “bajo control”, el control es una fantasía. No hay que desestructurarse, pero tampoco hay que ser rígidos en todo. La vida es… solo es, permítetelo y permíteselo a tus hijos también.

Recupera la maravilla de ser mamá.