-
Entradas recientes
Comentarios recientes
Archivos
- noviembre 2024
- octubre 2024
- septiembre 2024
- agosto 2024
- julio 2024
- junio 2024
- mayo 2024
- abril 2024
- marzo 2024
- febrero 2024
- agosto 2023
- julio 2023
- junio 2023
- mayo 2023
- abril 2023
- marzo 2023
- febrero 2023
- enero 2023
- diciembre 2022
- noviembre 2022
- octubre 2022
- septiembre 2022
- agosto 2022
- julio 2022
- junio 2022
- mayo 2022
- abril 2022
- febrero 2022
- enero 2022
- diciembre 2021
- noviembre 2021
- octubre 2021
- septiembre 2021
- agosto 2021
- julio 2021
- junio 2021
- mayo 2021
- abril 2021
- marzo 2021
- febrero 2021
- enero 2021
- diciembre 2020
- noviembre 2020
- octubre 2020
- septiembre 2020
- agosto 2020
- julio 2020
- junio 2020
- mayo 2020
- abril 2020
- marzo 2020
- febrero 2020
- enero 2020
- diciembre 2019
- noviembre 2019
- octubre 2019
- septiembre 2019
- agosto 2019
- julio 2019
- junio 2019
- mayo 2019
- abril 2019
- marzo 2019
- febrero 2019
- enero 2019
- diciembre 2018
- noviembre 2018
- octubre 2018
- septiembre 2018
- agosto 2018
- julio 2018
- junio 2018
- mayo 2018
- abril 2018
- marzo 2018
- febrero 2018
Categorías
Meta
El Tecnoestrés y la tecnofatiga.
Por Manuel Blanco, Consultor Empresarial
La llegada de nuevas tecnologías, de nuevas formar de estar conectado, de colaborar y trabajar, hacen que las personas sean mas productivas y también que pasen largos periodos de tiempo en línea.
En promedio en México pasamos 8 horas con 21 minutos conectados, es decir, un tercio de día. Este tiempo lo dedicamos al trabajo y al ocio. Lecturas de correo electrónico, mensajería instantánea, redes sociales, búsqueda de datos o información relevante para nuestro empleo ocupan la mayoría del tiempo. La llegada del teletrabajo, estudio en línea (que ya existía, pero se volvió la única manera de asistir a la escuela o universidad), y el contacto social, mayormente se han hecho en los últimos meses mediante dispositivos electrónicos. En el mes de septiembre, La Universidad Nacional Autónoma de Mexico publicó un estudio sobre tecnoestrés y tecnofatiga en México. En el estudio refieren que el 75% de los trabajadores en México, antes de la pandemia, parecían de estrés laboral y el 25% incluso tiene algún padecimiento mental. Actualmente el 50% de los trabajadores padecen algún padecimiento mental, según sus estimaciones.
El tecnoestrés se refiere al estrés derivado de introducción y uso de nuevas tecnologías en el trabajo, la que conlleva efectos psicosociales negativos. Cuando creímos que dominábamos el nuevo programa o las nuevas herramientas, se introducen nuevas. El cambio va a una velocidad mayor de lo que nuestro cerebro puede asimilar. La tecnofatiga es una sensación de agotamiento o cansancio derivado del uso de la tecnología. Nuestro cerebro esta “acostumbrado” a reaccionar a estímulos físicos, migrarlo a plataformas digitales implica un esfuerzo adicional mientras se habitúa a interactuar con las distintas expresiones y comunicación. También las personas vivimos un agotamiento y estrés por la gran cantidad de información a la que estamos expuesto.
Por otro lado tenemos la tecnoadicción, que es la dependencia de la tecnología y la tecnofobia, que es el rechazo a la tecnología, rechazando su uso e incluso hablar de ellas.
Los síntomas de padecer tecnoestres son agotamiento, dolor de cabeza, ansiedad, dolor en cuello y espalda, dificultades para dormir y ansiedad.
Que puedo hacer para prevenirla:
- Limitar el tiempo de navegación. Los nuevos dispositivos tienen configuraciones para determinar cuanto tiempo utilizarla o dedicar a cada aplicación.
- Tomar descansos de 10 minutos cada hora.
- Realizar ejercicios de relajación muscular en tu silla.
- Evitar la lectura en tabletas, computadora o celular.
- Crea una rutina para iniciar a trabajar y otra para suspender. Procura dejar el celular y las tabletas mínimo una hora antes de dormir.
- Realiza ejercicios de memoria, apréndete números de teléfono citas, usa agenda de papel, minimizando la dependencia de dispositivos electrónicos.
- Mantente al tanto de las tendencias tecnológicas escogiendo fuentes confiables y prácticas .
Estas herramientas te permitirán ser más productivo y mantenerte conectado sin superar tus limites. Existen iniciativas para legislar la desconexión digital del trabajo como un derecho. Esperemos podernos adaptar a la nueva normalidad siendo productivos, manteniéndonos sanos y logrando balancear la vida digital de la real.