¿ME GUSTA TANTO CORRER?

¿Me gusta tanto correr?

Esa pregunta me la vivo haciendo todos los días.

Suena mi despertador, son las 5am y no quiero abrir mis ojos pero debo voltear a mi despertador porque necesito apagarlo porque no quiero que ni mi esposa o mis hijos se vaya a despertar tan temprano.

Apago ese artefacto del demonio y me quedo en trance viendo hacia arriba y al universo, y lanzándome esa pregunta ¿Realmente me gusta tanto correr?

Pasan 10 minutos que los sentí como un segundo, y respondo “si, me gusta mucho correr y lo disfruto mucho”

Salgo de la cama como cual ninja, y avanzo en completa oscuridad a la sala para recoger mi ropa deportiva para comenzar a correr.

Lo más duro de correr en sí no es correr, sino salir de la cama tan calientita a correr, pero una vez que el pie derecho se adelanta y después el izquierdo hace lo sigo, ya lo demás es automático, entro en una especie de trance donde tengo tiempo para estar conmigo mismo, estoy tan oxigenado que mi mente trabaja a mil por hora.

He aprendido que todo depende de hacer una rutina, hacer un conjunto de actividades que después se formarán como un hábito.

Me meto en la cabeza que me debo de ganar mi baño del día y la mejor forma de hacerlo es corriendo.

Son las 5:30am y salgo a correr por las calles de mi colonia, soy un corredor urbano, ya tengo mis rutas diseñadas por kilómetros y por tiempos, selecciono mi play list que se llama “música para correr” ya sé que soy muy creativo, es una selección de música que me recuerda excelentes momentos (música techno de los 90´s) y música que me haga reflexionar (como por ejemplo el mantra de Tara Verde), mientras corro voy pensando que cada canción es mensaje que mi Dios me va compartiendo por las mañanas.

Usualmente corro 5kms por la mañana, termino feliz, emocionado, endorfinado, lleno de dopamina y serotonina, listo para bañarme, pues ya debo de comenzar a despertar a mi hijo mayor, para llevarlo a la escuela.

¿Qué por qué corro? ¿De quién huyo? ¿Sabes que se te van a arruinar las rodillas? Etc son las típicas preguntas que me realizan mis amigos sedentarios, que poco a poco están engordando y están dañando su cuerpo con excesos de sales, azucares y cual porquería se les ocurra, así que no me las tomo a personal. Yo cada año me siento mejor, tengo 41 años pero me siento de 20 años.

Cuando corro me siento más libre, es mi meditación, unos meditan en posición de flor de loto, yo medito corriendo. He aprendido a convivir como mi voz interna a la cual he bautizado como pepe grillo diabólico, ya casi no le hago caso, pues el no manda, lo escucho, lo amo y comienzo a correr, y como no tiene buena condición física, se cada atrás y cada paso que doy me acerco al verdadero Chuy Cruz, ese Chuy Cruz que ama, es feliz, agradecido y esta dispuesto a vivir a pesar del dolor que estoy cargando, pero que cada vez lo entiendo más y ya es más ligero.

Mi mejor terapeuta no fue un ser humano, mi mejor terapia ha sido correr. Correr me ha enseñado a vivir mi duelo por la muerte de mi hermano Mario, el nunca me conoció corriendo, pero desde el cielo esta observando como estoy devorando los kilómetros, y me imagino que hace una fiesta cada vez que salgo a correr.

Quiero volver a correr un maratón, ya llevo tiempo conviviendo con una lesión en los ligamentos de mi rodilla derecha, físicamente me dicen que ya no tengo nada, pero mi mente con miedo hace que me detenga. Quiero volver a sentir la emoción de correr 42 kilómetros con 195 metros, escuchar los gritos de las personas, buscar el rostro de mi hermano en las nubes y en las caras de las personas que salen a apoyar a los maratonistas y a los que están a punto de graduarse.

Correr me ha enseñado que la vida es como correr y correr es como vivir. ¿Quieres aprender a ganar? Corre 100 metros, ¿Quieres aprender a cambiar tu vida? Corre un maratón.

Por todo esto y más amo correr y espero seguirlo haciendo hasta mi último aliento, y espero en el cielo tengan buenas zapatillas para correr, que voy a querer seguir corriendo, ahora ya sin dolor en mi rodilla (a como echamos pretextos con la famosa rodilla)

Sal a correr, alcanza tus metas, deja atrás a los problemas y acércate cada vez más a esa persona que realmente si eres.

Tu amigo corredor

Chuy Cruz